Velatorios de Tamaulipas bajo la lupa de Coepris por esta razón
Coepris advierte que funerarias no pueden cobrar ni fungir como intermediarias en permisos sanitarios y alerta sobre abusos económicos a familias en duelo.

En medio del duelo y la urgencia que implica despedir a un familiar, muchas familias en Tamaulipas han sido víctimas de cobros excesivos por trámites sanitarios que, en realidad, tienen un costo oficial mucho menor. Ante esta situación, la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coepris) salió al paso para frenar estas prácticas y advertir que las funerarias no están autorizadas para actuar como intermediarias ante la dependencia.
Te puede interesar....
El comisionado estatal de Coepris, Mario Rebolledo Urcádiz, explicó que, además de las verificaciones permanentes en las 176 funerarias registradas en el padrón sanitario del estado, se ha detectado una práctica preocupante: algunos establecimientos cobran a las familias hasta cinco mil pesos por tramitar permisos cuyo costo real ronda apenas los mil 113 pesos.
¿Por qué Coepris intervino contra las funerarias?
De acuerdo con la autoridad sanitaria, se han documentado casos en los que funerarias aprovechan la vulnerabilidad emocional de las familias para inflar el costo de permisos como inhumación, exhumación, reacomodo o traslado de restos humanos.
“Hemos detectado que algunas funerarias cobran excesivamente por la obtención de permisos sanitarios, cuando estos deben ser tramitados directamente por los familiares. Coepris no tiene intermediarios”, subrayó Rebolledo Urcádiz.
Te puede interesar....
El funcionario recordó que los permisos sanitarios no forman parte del servicio funerario, sino que son trámites oficiales ante la autoridad sanitaria, por lo que nadie puede cobrarlos de manera adicional ni gestionarlos sin autorización expresa.
¿Cuánto cuesta realmente un permiso sanitario?
Uno de los puntos que más indignación ha generado es la diferencia entre el costo oficial y lo que algunas funerarias cobran. Según Coepris, el trámite sanitario tiene un costo aproximado de mil 113 pesos, dependiendo del tipo de permiso.
Sin embargo, se han reportado casos en los que los establecimientos llegan a cobrar hasta cinco veces más, argumentando “gestión” o “urgencia”, cuando en realidad el trámite puede realizarse directamente por los familiares, ya sea de forma presencial o por medios electrónicos.
Te puede interesar....
La recomendación de la autoridad es clara: no pagar intermediarios y acudir directamente a Coepris para evitar abusos.
¿Qué sanciones enfrentan las funerarias que incumplan?
La advertencia no es menor. Coepris informó que las funerarias que insistan en fungir como intermediarias o que cobren indebidamente por permisos sanitarios podrían enfrentar sanciones severas, con multas que van desde 169 mil pesos hasta más de un millón 300 mil pesos, dependiendo de la gravedad y reincidencia.
Además, estas prácticas podrían derivar en procedimientos administrativos, suspensión de actividades e incluso la cancelación de permisos de operación.
Te puede interesar....
Este tema ya llegó al ámbito legislativo. En octubre pasado, el Congreso de Tamaulipas dio entrada a una iniciativa que busca reformar la Ley de Salud estatal, para prohibir expresamente que los prestadores de servicios funerarios actúen como intermediarios en trámites oficiales ante Coepris.
¿Cómo pueden protegerse las familias en momentos de duelo?
Las autoridades reconocen que el momento en que ocurre un fallecimiento es uno de los más difíciles para las familias, por lo que reiteraron un llamado a informarse y no dejarse presionar.
Coepris recomienda:
Realizar directamente los trámites sanitarios.
Solicitar siempre comprobantes oficiales de los pagos.
Denunciar cobros excesivos o abusos ante la autoridad sanitaria.
“Entendemos el dolor por el que atraviesan las familias, pero nadie debe lucrar con esa necesidad”, insistió el comisionado estatal.
Con estas acciones, Coepris busca poner un alto a prácticas que, además de ilegales, resultan profundamente inhumanas. Porque despedir a un ser querido ya es suficientemente difícil como para sumar, además, un abuso económico.













